Skip to main content
Monthly Archives

mayo 2016

Cuando el sexo se vive mal

By Blog, Noticias

Algunas personas debido a su educación y al ambiente en el que se han criado desarrollan conductas de evitación de la sexualidad que les impiden vivir sus relaciones amorosas con naturalidad.

sexualidad negativaTodavía llegan a consulta, aunque no con mucha frecuencia, personas que tienen dificultades para iniciar y compartir el placer sexual. Como el caso de una guapa chica de aproximadamente unos 30 años, agradable, dulce, también insegura y retraída. Ella reconoce que está bloqueada en ese sentido, que a su edad no es capaz de acariciar sus partes íntimas (así las llama). El lenguaje que utiliza es interesante. No habla de vulva o de clítoris; utiliza “partes íntimas” para referirse a unas zonas del cuerpo que considera innombrables, y por ende, inaccesibles. “De eso no se habla” y “eso no se toca” son mensajes habituales que muchas personas han oído, pero que no afecta a todas por igual.

Para Mercedes, vamos a llamarla así, la relación con el sexo siempre ha sido incomoda. Ella ha seguido los dictámenes de su entorno, criada en un ambiente muy tradicional, en una familia rígida, con ausencia de contacto físico. Mercedes cuenta como nunca ha visto en sus padres la menor expresión de cariño, ni tan siquiera darse un beso. Con los hijos tampoco se prodigaban. En su infancia no recuerda ni abrazos, ni caricias. Por otro lado, en el colegio de monjas de su infancia, reforzaban la visión negativa y peligrosa de la sexualidad. Ella se fue acomodando a su entorno y fue dejando de lado cualquier expresión sexual.

Cuando Mercedes acude a consulta es una chica que aparentemente tiene todo para ser feliz. Como buenacuando el sexo se vive mal - estudiante, terminó su carrera con excelentes notas y tiene un buen trabajo. Y un recién estrenado novio, que la valora y la desea. Y ahí viene el problema. Ella llega a decir: “si no existiera el sexo, todo sería perfectoYo estoy enamorada de él, pero cualquier acercamiento sexual me resulta muy incomodo”. Por su parte, al chico, criado en un ambiente mucho más abierto y con un sentido más positivo del sexo, le resulta difícil entender las reservas de Mercedes; no comprende que si ella lo quiere —y de eso no tiene duda— tenga tantas dificultades para demostrárselo en la cama.

Ella comenta textualmente: “yo era de esas personas que no se masturbaba porqu
e me daba pánico acariciar mi cuerpo. Me resultaba imposible pasar mis dedos por los genitales; ese calor, esa humedad me asustaban. Venir a consulta y hablar del tema me ha ayudado mucho. He aprendido a satisfacerme a mí; ahora he conseguido descubrir mi cuerpo y mis reacciones. Con mi novio he ido aprendiendo que no hay porque tener miedo. He conseguido liberarme de todo tipo de aturas y miedos que sentía antes. Ahora todos los días acaricio mi cuerpo y me siento bien, no siempre lo hago para conseguir un orgasmo, pero me reconforta saber que estoy a gusto con mi cuerpo, que mi cuerpo es mío, y que ya no hay zonas tabús para mí”.

Traemos a colación este caso para llamar la atención y apoyar a las personas que debido a las presiones del ambiente viven su sexualidad de forma problemática, en mayor o menor grado, llegando a sentir malestar, miedo y culpa. Es una pena que todavía ocurran estas cosas y que para algunas personas sea tan difícil disfrutar de la sexualidad, cuando por naturaleza somos seres sexuados y el placer debería ser una fuente de satisfacción y no un motivo de conflicto.

¿En alguna época de tu vida has vivido la sexualidad de manera problemática? ¿Cómo te imaginas vivir la sexualidad de esa manera? ¿Conoces algún caso parecido al que contamos?

MARIA PEREZ CONCHILLO

El Suelo Pélvico

By Blog, Noticias

Llamamos suelo pélvico a la musculatura de la parte inferior de la cavidad pélvica que, por nuestra condición de animales bípedos, debe luchar contra la gravedad y, como una hamaca, sujeta nuestras vísceras pélvicas. Por este motivo además está implicado en los mecanismos de continencia y en la actividad sexual.

SUELO PELVICO

La Doctora Myriam Ribes, ginecóloga y sexóloga, además de excelente profesional, compañera y amiga, dio una brillante conferencia dentro de las Jornadas universitarias internacionales de Salud Sexual del Máster de Sexología UNED-ESPILL celebradas en Madrid. Su experiencia profesional sobre salud femenina la motivaron a escoger el tema del suelo pélvico, ya que tiene una importante incidencia en la función sexual y sin embargo los conocimientos sobre el tema no están bastante difundidos. Por eso nos pareció interesante ofrecer en este post un resumen de las interesantes aportaciones de Myriam.

En su explicación la Dra. Ribes insistió en la importancia de mantener el suelo pélvico en buen estado para evitar un prolapso genital y rectal (Caída o descenso total o parcial de la vejiga, porción final del intestino y, en las mujeres, también del útero), la incontinencia urinaria y fecal y determinadas disfunciones sexuales.

SUELO PLVICO

Para mantener el suelo pélvico en buen estado es recomendable evitar el estreñimiento, la obesidad, el tabaquismo, la tos crónica, ropa muy ajustada en la región abdominal, levantar mucho peso sin contraer el suelo pélvico.También hay que prestar especial atención a determinadas prácticas deportivas como hacer abdominales inadecuados (los clásicos), ya que potencian una serie de músculos en detrimento del suelo pélvico. Algunas profesiones, como la de cantante, músicos que tocan instrumentos de viento, bailarinas, además de la de deportista, son de alto riesgo porque entrañan inconvenientes adicionales para mantener la salud del suelo pélvico.

Como ginecóloga hizo hincapié en los problemas femeninos, porque procesos fisiológicos como el embarazo, el parto y la menopausia, provocan un debilitamiento muscular. En el embarazo por el peso adicional y por las hormonas progesterona y relaxina que tienen un efecto relajador. En el parto, sobre todo si es en decúbito supino y en los traumáticos, porque produce una distensión y una elongación desequilibrada. Durante la menopausia por el descenso en la producción de estrógenos que provocará la falta de tono y, por tanto, una pérdida de flexibilidad.

Mantener el suelo pélvico en buen estado no es solo cosa de mujeres. Los hombres, aunque en menor grado, también son susceptibles de perder su tonicidad y de sufrir prolapso e incontinencia fecal.

Como conclusión, podemos destacar que debemos cuidar el suelo pélvico y para mantenerlo en forma la Dra. Ribes sugirió interesantes recomendaciones para fortalecerlo. En el mercado existen unos conos vaginales, con distintos pesos, que la mujer debe introducir en su vagina e intentar sostener. Progresivamente deberá ir aumentando el peso. También hay quien recomienda el uso de bolas chinas y vibradores. Pero los más conocidos y usados son los ejercicios de Kegel, en honor al Dr. Arnold Kegel. Se trata de contraer los músculos del suelo pélvico, una manera de saber cuales son esos músculos es cortar el flujo de la orina, aunque eso solamente se debe hacer para  identificarlos, ya que no es bueno interrumpir la micción. Los ejercicios de Kegel se pueden hacer en cualquier lugar y es recomendable hacer series de diez contracciones, diez veces, y se pueden hacer varias veces al día y de esa manera la musculatura estará en buena forma, además de producir una estimulante sensación en la zona genital.

CRISTINA GONZALEZ